Generalidades |
El Picón del Fraile es el punto culminante del macizo.
Los mapas topográficos siguen indicando una altitud de 1632 m, pero
no tienen en cuenta el desmonte realizado para instalar una base militar de
la OTAN en la plataforma cenital de esta hermosa montaña, cuyo acceso
está prohibido en la actualidad. Dicha montaña separa los valles
de Bustalveinte (al oeste) y Hondojón (al este), y se prolonga hacia
el noreste por una plataforma de menor altitud que queda interrumpida bruscamente
al norte por los farallones de Los Campanarios. Podemos describirla globalmente
como un lapiaz monoclinal tumbado hacia el sureste y lacerado por grandes
fracturas que dan lugar a vallejos y fosas, bajo los cuales se desarrollan
las redes subterráneas. La vertiente occidental es más empinada
y está formada por una serie de gradas escarpadas, correspondientes
a las alternancias de areniscas y calizas. En esas barreras rocosas se abre
un buen número de cavidades (Cueva del Jabato, Cueva de Bustalveinte,
Cueva de los Calígrafos…).
El mejor acceso a la zona se realiza desde el portillo de Lunada, siguiendo
un buen sendero que lleva hasta el collado de Bustalveinte y, a continuación,
a la vertiente occidental del Picón del Fraile (una hora y media de
marcha para alcanzar las cavidades más elevadas).
El Picón del Fraile contemplado desde el collado de Bustalveinte. En su cumbre, la base militar domina la vertiente occidental, en la cual se abren las entradas superiores a la red del Gándara.
Para alcanzar el lapiaz propiamente dicho no es aconsejable tomar la cerretera prohibida que conduce a la base militar de la cumbre del Picón. Aunque los términos de la prohibición de paso son ambiguos, es preferible bordear el obstáculo ascendiendo por la vertiente oriental de la montaña. Una serie de pistas recientes permiten remontar a la Breña y el collado de La Sía (2 km desde el cruce de La Gándara), para, a continuación, descender al Hondojón (se aconseja un vehículo todo terreno). A partir de allí, un sendero bastante discreto asciende a las cabañas del Pozo para, poco después, descender al circo de Breña Román. Una vez alcanzado el collado, una senda desdibujada se encamina hacia Mota en Cabeza y permite acceder a la torca homónima, a la del Requiem y otras cavidades cercanas (1 hora de marcha desde Hondojón). El acceso al lapiaz de Los Campanarios se realiza desde el collado, siguiendo la línea de crestas. Por último, para alcanzar las cavidades situadas más al norte, por encima de Breña Román (Cueva de la Carroña, Torca de Mazo Blanco…), lo más sencillo es tomar la pista apata para todo terrenos que, desde los Collados de Asón, asciende al Alto de la Posadía. (Las pistas mencionadas, tanto en la vertiente cántabra como en la burgalesa, son de acceso restringido).
Página inicial Karstexplo | Karst de los Alpes | Cuevas del Alto Asón